domingo, 5 de febrero de 2012

Que facil es insultar y con ello evaluar.

Estimados amigos, seguro que os habrá pasado en el alguna ocasión, bien interpretando el papel de emisor o bien el de receptor de algun insulto.Ayer, cuando cruzaba San Javier, a la altura de un paso de cebra, con la visión  oculta por una furgoneta cruzaba una chica, que al verme llegar a  su altura me increpó llamándome "GILIPOLLAS", a lo cual le correspondí con un saludo de disculpa. En el resto de trayecto fui pensando, que es muy facil el insulto y  da poco resultado mas allá de la liberación de estress y la demostración de la mala educación recibida, porque lo que es cierto es que dicha chica no me conoce de nada y me ha valorado únicamente por un hecho concreto y miserable en el tiempo.
Lejos de invadirme la ira o querer devolverle el insulto, lo que me transmitió fue tristeza y pena,junto a una posiblemente equivocada evaluación rapida de la persona que me insultaba, reflejandose a mi vista como una persona dura y vulgar, posiblemente con problemas personales y de baja autoestima.
El resultado es obvio, los dos nos  hemos evaluado agriamente en unos pocos segundos y la verdad cierta es ,que seguramente estamos ambos equivocados . o no ?

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